Prácticas de autocuidado y escucha profunda de tu cuerpo
Las clases de Crisálida invitan a despertar el cuerpo, recuperar tu sensibilidad y extender las alas.
En nuestra sociedad actual es muy común vivir desconectados de nuestro cuerpo, tener el cuerpo abandonado. Esta realidad nos impide poder ser responsables de nuestra buena salud, ya que para poder gozar de buena salud es necesario escuchar el cuerpo y sus sintomas, la información constante que a partir de sensaciones, nuestro cuerpo nos brinda como «newsletter» de nuestro estado, de nuestras necesidades y debilidades.
En las sesiones de Crisálida, nos damos tiempo y espacio para prestar atención, respetar y cuidar nuestro cuerpo, y como consecuencia nuestra salud.
En una sesión semanal, nos reunimos desde casa, en nuestro espacio seguro y cómodo para todos, para practicar ejercicios que beben de varias filosofías y disciplinas, como el Yoga, el Pilates, técnicas de meditación y relajación que nos permiten abrir el cuerpo y despertar nuestra sensibilidad: estirar y relajar nuestra estructura interna, a fin de restablecer el flujo libre de energía en nuestro cuerpo, que es garantía de salud y vitalidad.
Buscamos crear una relación sana con nuestro cuerpo y reconciliarnos con él. Ser conscientes de nuestros músculos, fascias, ligamentos, huesos y articulaciones, de la respiración y habitar el presente, nuestra presencia.
Detalles del curso
- Modalidad: online
- Frecuencia: 1 clase por semana
- Horario: Agenda tu sesión según tu disponibilidad.
- Inicio: 06 de octubre de 2023
A quién va dirigido
- Crisálida es útil para cualquier persona.
- Para quien busca una buena manera de empezar o acabar el día.
- Para aquellos que están pasando por una lesión o un proceso de recuperación.
- Para reducir la ansiedad, el miedo y el stress.
- Como calentamiento o preparación para otro entrenamiento.
- Para aquellos que buscan sentir su espacio físico y emocional.
- Para aquellos que viven con dolor crónico.
- Para quien quiere vivir su cuerpo como un aliado y no como un enemigo.